El régimen reitera que no está dispuesto a hacer cambios para facilitar
el fin del embargo
DDC | Nueva York | 27 Oct 2015 - 8:35 pm.
'Cuba jamás negociará su sistema socialista, ni sus asuntos internos',
dice Bruno Rodríguez en un duro discurso ante la Asamblea General de la ONU.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, negó este martes ante la Asamblea
General de la ONU que las medidas adoptadas por el presidente
estadounidense, Barack Obama, impliquen una modificación "tangible,
sustancial" del embargo, y rechazó que el régimen de Raúl Castro deba
hacer cambios en su "ordenamiento" para facilitar su aplicación.
Rodríguez habló ante la Asamblea General antes de la votación de la
tradicional resolución de La Habana contra el embargo, que esta vez fue
aprobada con 191 votos a favor y la oposición de Estados Unidos e Israel.
Aunque reconoció que el presidente estadounidense, Barack Obama, se ha
involucrado en el debate contra el embargo y ha pedido al Congreso que
lo elimine, el canciller pronunció un duro discurso en el atacó a
Washington, minimizó el alcance del cambio de política hacia Cuba y
afirmó que mantiene el objetivo de derrocar al régimen.
Siguiendo la línea de exigir más concesiones a Washington, Rodríguez
dijo que "las medidas adoptadas por el ejecutivo norteamericano (…)
aunque positivas, solo modifican de forma muy limitada algunos elementos
de la aplicación del bloqueo".
Añadió que muchas de esas disposiciones "no podrán implementarse a menos
que se adopten otras"; entre ellas que La Habana pueda "exportar e
importar libremente productos y servicios hacia o desde Estados Unidos;
utilizar el dólar estadounidense en sus transacciones financieras
internacionales y operar cuentas en esa moneda en bancos de terceros
países; así como tener acceso a créditos y financiamientos de entidades
privadas y de las instituciones financieras internacionales".
"El problema no es que el ordenamiento cubano dificulte la aplicación de
estas medidas y tenga que ser modificado para facilitarlo, como algunos
funcionarios estadounidenses han declarado. El problema es la existencia
implacable y sistémica del bloqueo", dijo.
Advirtió que el régimen no piensa aceptar como condición para un
eventual levantamiento o modificación del embargo la implementación de
"cambios internos".
"Cuba está dispuesta a aceptar las oportunidades y también los desafíos
de una nueva etapa en las relaciones entre ambos países, pero jamás
negociará su sistema socialista, ni sus asuntos internos", dijo.
Diez meses después del acuerdo Obama-Castro
Rodríguez consideró que, diez meses después de que Obama y Raúl Castro
anunciaran un acuerdo para restablecer relaciones, "no se ha producido
ninguna modificación tangible, sustancial, en la práctica del bloqueo".
Mencionó ejemplos que, según La Habana, muestran las consecuencias del
embargo.
Entre ellos, multas a varios bancos, la cancelación de un contrato de
servicios a la mensajería SWIFT, la retención del primer pago de la
compañía Sprint para iniciar las llamadas telefónicas directas, y de
varias transferencias bancarias al Gobierno cubano por la operación de
vuelos chárter.
El canciller señaló además la disminución progresiva de las compras de
alimentos a Estados Unidos, aprobadas en 2000, y lo achacó a que, a
juicio del Gobierno cubano, "están sujetas a condiciones
discriminatorias y onerosas".
En cuanto a las compras de medicamentos, también aprobadas en 2000, dijo
que La Habana "debe dar cuenta sobre el destinatario final de las
medicinas adquiridas y no puede hacer los pagos directamente, sino a
través de terceros y en una moneda distinta al dólar, lo cual implica
dificultades, demoras y costos adicionales".
Aseguró que la compañía Elekta "confirmó el pasado 2 de septiembre que
no podrá suministrar (…) el isótopo radioactivo Iridio-192", destinado a
garantiza el funcionamiento de equipos "imprescindibles para impartir
tratamientos de mayor calidad y precisión contra el cáncer, dado que su
suministrador, la compañía estadounidense Mallinckrodt Pharmaceuticals,
se negó a venderlo con destino a Cuba".
Rodríguez consideró que, por ejemplos como ese, el embargo "califica
como acto de genocidio".
Asimismo, volvió a señalar la política estadounidense como "el principal
obstáculo para el desarrollo económico y social" de la Isla, algo que ya
hizo Raúl Castro en el mismo escenario, en septiembre pasado.
Sin mencionar los graves errores económicos cometidos por el régimen de
los Castro durante más de medio siglo, el canciller culpó al embargo de
las "carencias y privaciones" que ha sufrido el "77% de los cubanos (…)
desde su nacimiento".
Repitió las exigencias del régimen para que Obama use sus "prerrogativas
ejecutivas" y modifique "sustancialmente" la aplicación práctica del
embargo, y restó importancia al cambio operado por Washington en su
política hacia La Habana.
"Algunos voceros del Gobierno de los Estados Unidos han declarado que la
anunciada política hacia Cuba significa un cambio en los métodos, pero
no en los objetivos", afirmó. "De ser así, el proceso hacia la
normalización de las relaciones entre los Estados Unidos y Cuba
enfrentará muy serios obstáculos", amenazó.
Source: El régimen reitera que no está dispuesto a hacer cambios para
facilitar el fin del embargo | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1445970921_17758.html
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