Las reformas de Raúl Castro se detienen por completo
Los cubanos están perplejos debido a que Marino Murillo, el 'zar' de las
reformas económicas, no ha hablado en público por más de un año.
INTERNACIONAL POR: FINANCIAL TIMES MARZO 31 DE 2017 - 09:02 P.M.
El presidente cubano, Raúl Castro, está preparándose para dejar su cargo
el próximo año, Venezuela ha recortado millones de dólares en ayuda y la
elección de Donald Trump ha ensombrecido la incipiente relación entre
EE. UU. y Cuba. Sacudido por el cambio, el gobierno cubano ha dejado que
cese su programa de reformas domésticas y el partido comunista ha
endurecido su postura.
Marino Murillo, el alto funcionario encargado de las reformas en Cuba,
no ha hecho pronunciamientos en público durante más de un año. Su
ausencia ha desconcertado a los cubanos y ha socavado las grandes
expectativas que había fomentado el impulso liberalizador, a nivel
doméstico e internacional.
"Hay tres factores que ocasionaron la pausa de las reformas, las cuales
seguramente continuarán en algún momento", dice Richard Feinberg, un
experto sobre Cuba en la Institución Brookings en Washington. "Los altos
dirigentes están enfocados en manejar la autoridad; están planeando la
sucesión de Raúl Castro y están intentando manejar la reacción negativa
ante la emergente inequidad, los bajos salarios estatales y la inflación".
Castro convirtió a la reforma en el sello de su presidencia cuando
asumió el cargo de su hermano Fidel Castro en 2008. Intentó
descentralizar la economía e impulsar la productividad, permitiendo el
autoempleo, recortando la burocracia estatal, acogiendo la inversión
extranjera y unificando el sistema monetario dual de Cuba.
En este sentido, Murillo, que llegó a ser conocido como el 'zar de las
reformas económicas' cuando fue designado como el ministro de Economía
en 2009, era el tecnócrata a cargo de implementar los cambios. De hecho,
Castro y él eran un equipo dedicado a convencer a la impasible
burocracia de Cuba de aceptar las reformas.
Respaldado por el prestigio revolucionario de Castro, Murillo hizo
largas presentaciones de PowerPoint que explicaban los cambios a
miembros del partido y del gobierno. Posteriormente, sus conversaciones
de una hora de duración se transmitían en la televisión estatal.
Pero Murillo no ha dicho ni una palabra en público desde julio. Al mismo
tiempo, se han impuesto controles de precios a los negocios agrícolas y
de transporte del incipiente sector privado.
Este cambio se ha dado conforme el presidente, de 85 años de edad, se
prepara para cumplir su promesa de finalizar su mandato como presidente
el 24 de febrero del próximo año. Si es así, 2018 será la primera vez en
seis décadas en la que Cuba no ha sido gobernada por un Castro, aunque
se espera que este continúe como cabeza del partido comunista y de las
fuerzas armadas. Fidel Castro se murió el pasado noviembre.
"Por un lado, las reformas no han sido suficientes, pero a la vez han
ido demasiado lejos", dice Bert Hoffman, un experto sobre Cuba en el
Instituto Alemán de Estudios Globales y Regionales. "No han sido
suficientes para impulsar el crecimiento pero han ido demasiado lejos en
cuanto a ensanchar la brecha de inequidad social e incrementar el costo
de la vida. El partido comunista está preocupado por el descontento
creado por esta situación".
Estas tensiones se manifestaron en el congreso del partido en abril de
2016, en el que se admitió que las reformas no habían cumplido con las
expectativas populares en términos del crecimiento económico, del
suministro de bienes y del aumento de salarios. Al mismo tiempo, se
transmitió un debate en la televisión estatal que mostró a delegados del
partido encolerizados sobre el hecho de que un agricultor de cebollas
había ganado suficiente dinero para comprar un coche y reparar su casa.
Esta no es la única vez que Cuba se ha encontrado en esta situación. Los
funcionarios reformistas a menudo han sido detenidos después de iniciar
programas liberadores por los dirigentes tradicionales debido a su temor
a perder control del país.
Un problema económico que ha afectado la situación es que Caracas, que
durante muchos años le ha suministrado 100.000 barriles de petróleo
subvencionado al día a La Habana, se ha visto forzada a recortar envíos
en cerca de 40%. Como resultado, la economía de Cuba se encogió cerca de
1% en 2016, cayendo en su primera recesión desde el colapso de la Unión
Soviética.
Otro revés para los reformistas ha sido la promesa de Trump de reevaluar
el detente iniciado por su predecesor Barack Obama. Hasta el momento, él
no ha continuado este proceso y el Departamento de Estado no ha nombrado
a un funcionario a cargo de asuntos latinoamericanos.
Algunos negocios estadounidenses han reducido su euforia inicial sobre
sus oportunidades comerciales en Cuba. A pesar de que 615.000
cubano-americanos y turistas estadounidenses visitaron en país el año
pasado - del total de 4 millones de visitantes extranjeros - Frontier
Airlines, Silver Airways, American Airlines y JetBlue han cancelado o
reducido el número de vuelos a Cuba, citando una falta de demanda.
El corolario de darle prioridad a la estabilidad política sobre las
reformas económicas, al menos por ahora, es que las quejas sobre la
inercia del gobierno, los bajos salarios, los precios altos, la escasez
y el deterioro de los servicios se han vuelto rutinarias.
Una clara señal de esta situación se reveló en una rara encuesta privada
realizada en Cuba a finales del año pasado por Norc, un grupo de
investigación independiente de la Universidad de Chicago, en el que 46%
de los encuestados describieron a la economía cubana como 'pobre o muy
pobre'. Un número similar respondió que pensaba que la situación se
mantendría igual y sólo tres de cada diez encuestados pensaban que la
economía iba a mejorar. Increíblemente, la mitad de los cubanos
encuestados dijeron que querían dejar el país.
Source: Reformas económicas en Cuba se detienen | Internacional |
Portafolio -
http://www.portafolio.co/internacional/reformas-economicas-en-cuba-se-detienen-504601
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