Sin embargo, me ajusto
ROBERTO MADRIGAL | Cincinnati | 25 Jun 2014 - 2:44 pm.
Los resultados de la encuesta de FIU también reflejan la nueva
constelación de la población del condado Miami-Dade.
A pesar de no tener conocimiento de la metodología utilizada en la
recolección y procesamiento de datos, supondré como confiables los
resultados de la encuesta realizada por la Universidad Internacional de
la Florida, porque no me asombran.
Las tres leyes en cuestión no tienen ninguna relación. El embargo
comenzó a ejecutarse el 19 de octubre de 1960 y se finalizó el 7 de
febrero de 1962 en reacción a la nacionalización de empresas americanas.
La ruptura de relaciones diplomáticas tuvo lugar el 3 de enero de 1961,
debido a la creciente hostilidad entre ambas naciones y a la acusación
de Castro de que los Estados Unidos utilizaban su embajada en Cuba como
un nido de espías. La Ley de Ajuste de cubanos se firmó el 2 de
noviembre de 1966 en respuesta a la ola migratoria ocurrida a través del
puerto de Camarioca entre octubre y noviembre de 1965, para de alguna
forma normalizar el estatus migratorio de los cubanos.
Si se deroga el embargo no necesariamente se afectan las otras dos. Si
se deroga la Ley de Ajuste, tampoco existiría un efecto causal sobre las
otras dos, pero si se normalizan las relaciones diplomáticas,
prácticamente las otras dos no tendrían razón de ser.
Es por ello que los cubanos están, según la encuesta, casi unánimemente
a favor del mantenimiento del ajuste y más divididos respecto a la
derogación de las otras dos leyes. Vaya, que tontos no somos, eso de
perder privilegios no se nos da bien.
Estos resultados también reflejan la nueva constelación de la población
del condado Miami-Dade, sobre todo el efecto de las nuevas generaciones
de ¿exiliados? Sin tener que recurrir a las estadísticas, ya se me hace
un lugar común demasiado frecuente escuchar de personas que llegan, se
benefician del ajuste y al día siguiente de obtener su residencia
comienzan el papeleo para viajar a Cuba. Esa conducta resume los
resultados de la encuesta.
Lo noté por primera vez durante un festival de cine en Toronto, en 1998,
mientras conversaba con un grupo de recién llegados. El exilio, salvo
excepciones, ya no tenía matices políticos. Dieciséis años después es
tema de dinosaurios.
El embargo ya lo han roto las remesas, los viajes a la Isla, los
intercambios culturales y las interminables visitas de los familiares
acá. Las relaciones diplomáticas facilitarían ese proceso. El ajuste es
otra cosa, es lo que permite todo lo anterior. Esto no es una opinión,
es, desgraciadamente, una realidad por encima de consideraciones éticas
o políticas. Es quizá un llamado a una reflexión más profunda, más allá
de los límites de la encuesta.
Source: Sin embargo, me ajusto | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1403700280_9219.html
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment